En el km 27 de la carretera que une la Costa del Sol y Granada hay un desvío de 6 kilometros que conduce hacia Lanjarón.

Lanjarón se encuentra al pie de la colina Bordaila. Tiene un rio llena de trucha y un paisaje increíble que le han convertido el lugar en un lugar de veraneo para muchos- que incluye un spa. Es el último pueblo grande y urbano que puedes encontrar cuando estás en ruta a Las Alpujarras.

La misma carretera regional te lleva a Orgiva (9 km), donde el camino se ramifica en la Alpujarra Alta y Baja, respectivamente. Antes de que llegues a Orgiva, hay un desvío para entrar a Cañar.

Cañar es un pueblo muy pequeño y tradicional. Las casas blancas con techos planos están hechas con una especie de barro que sólo se encuentran en esta región.
Pampaneira y Bubión se encuentran al lado de un acantilado. Ofrecen un espléndido panorama de un valle lleno de árboles frutales, pastos, nogales y castaños que contraste con las casas cúbicos de los pueblos. Capileira está muy cerca. Desde allí, el viajero tiene la posibilidad de elegir entre subir hacia el Mulhacén y el Veleta (pero sólo durante el verano ya que es peligroso con mal tiempo) o continuar su visita a Las Alpujarras.

Trevélez (35 km de Orgiva) es visible después de bordear un tramo largo del río que lleva su nombre. Además, está rodeado por huertas y árboles frondosos que forman un valle profundo. La zona alta del pueblo es preciosa y única. Adamas, Trevélez tiene uno de los mejores jamones de la región.

Entre Trevélez y Bérchules (21km) el paisaje cambia. Mecina, Bombarón y Yegen, ya pasar por alto la Alpujarra baja.

Unos 2 km de Mecina-Bombarónel, después de pasar por Cádiar, Torvizcón y Los Tablones, llegarás a Vélez de Benaudalla, donde se puede volver a la CN-323 y volver a la costa.

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